En la
vida cotidiana vemos como los jóvenes no se interesan por el emprendimiento ni
por innovar, cuando salen del colegio piensan en estudiar y luego tener un
trabajo en el cual se desarrolle su carrera estudiada y algunos no tienen los
recursos para poder pagar su estudio así que toman un trabajo que les ayude a
pagar su estudio pero hoy en día el sistema nos obliga y nos crea la necesidad
de unirnos a el, ya que somos los empleados de otros y trabajamos luego para
poder unirnos al consumismo de hoy en día, pero no piensan en poder ser sus
propios jefes y de poder crearle al sistema la necesidad de adquirir un
producto, hace unos años podíamos vivir sin suplementos vitamínicos como el
“tarrito rojo” pero poco a poco se convirtió en una necesidad así que por que
no generar una a un determinado publico para poder así crear una microempresa y
entrar al sistema como su propio jefe, para esto aun que muchos piensan que es
necesario el echo de tener mucho capital y poder con este lanzar un producto
nuevo e impactante, pero en realidad para ser un emprendedor se necesitan 3
cosas: poder imaginar lo inimaginable, perseverancia y un pequeño capital no
mucho como lo presenta este proyecto y con esto se forma un producto el cual
podemos volverlo una necesidad para el consumidor y para el publico al cual nos
dirigimos.